domingo, 21 de octubre de 2012

¿Vivimos en una simulación virtual?



Esta vez les traigo un pensamiento que es una inquietud en esas noches en que uno no puede dormir y la mente empieza a vagar, husmeando en todos esos rincones olvidados maravillándose por lo que hay y uno olvida. Y entonces uno no deja de pensar en ello.
Hace tiempo leí sobre esta inquietud de alguien más, que se terminó haciendo mía también. ¿Cómo saber si vivimos o no en una simulación virtual? ¿Por qué habríamos de pensar que vivimos en una? Pues, para aquella persona, y la razón principal de la inquietud, es por el colapso de la función de onda. Pero, ¿qué es el colapso de la función de la onda? Explicado en pocas palabras, es la determinación en un estado debido a la observación en un sistema. Una partícula, al no ser observada, se encuentra en distintos estados al mismo tiempo, como una onda, pero al ser observada, “sus estados” colapsan, quedando sólo uno, el observado.
Bien, algo difícil de digerir, pero sin relación todavía con la simulación, así que iremos adentrándonos, explicando como funcionan algunas simulaciones hasta llegar a algunas singularidades. A encender la imaginación…

¿Qué es una simulación y cómo funciona?
Simulación de un choque entre dos galaxias
Una simulación es una modelación de determinado fenómeno, suceso o hipótesis. Así, cuando uno simula, está modelando determinada actitud, acción o pensamiento. Suelen funcionar recreando lo que se quiere estudiar de la manera más realista. En la actualidad, gran parte de las simulaciones se hacen digitalmente en ordenadores. En este caso, un conjunto de instrucciones y reglas lógicas programadas, alimentadas con datos específicos, empiezan a modelar lo que uno desea, desde factores climáticos, hasta respuestas de ciertas enzimas en determinadas circunstancias. Si tuviéramos suficiente potencia de cálculo y la capacidad de programar todas las reglas e instrucciones modelando un ser vivo, digamos, un ratón, entonces los experimentos con ratones pasarían a ser innecesarios. Lamentablemente, esto no es posible todavía, cosas como la teoría del caos y la increíble cantidad de información de la materia viva, mantienen nuestras simulaciones muy limitadas en muchos ámbitos, siendo incapaces de modelar climas con la exactitud requerida o de sustituir animales o plantas en experimentos.

Ahora bien, hay determinadas simulaciones, como las de los videojuegos, cuya característica es que tienen que representar gráficamente en tiempo real los resultados de las instrucciones. Aquellos carismáticos personajes no son más que programación, un conjunto de reglas ordenadas para formar esa figura en ese determinado momento. Cuando algo sale de pantalla o no tiene la capacidad de ser observado, pasa a ser computado de manera “secundaria”. No se destinan recursos a mostrar que pasa ahí, aunque siga computándose lo que sucede ahí porque podría afectar al volver a mostrar esa parte o al transitar algo por ahí en vía de ser mostrado. Podría decirse que sigue existiendo ese espacio, aunque no se manifieste directamente. Claro, estas simulaciones siguen siendo un juego de niños, pero ilustran muy bien una parte importante de la inquietud principal. ¿Qué pasaría si el colapso se diera simplemente porque tiene que ser computada esa parte? De otra forma, esa parte no es visible, así que existiría, pero no sería representada gráficamente. Al ser observada, se computa su estado y entonces podemos saberlo. ¿Vivimos en una simulación? No entraré a discutir aquí el terrible componente antropocéntrico en esta premisa, aunque creo que todos lo han visto. No es parte del tema.

Si dejamos fluir a la mente, nos entrarán otras interrogantes. ¿Puede existir una simulación de un universo entero? ¿habrá fallos? ¿existirá alguna especie de Neo que nos libere de este mundo virtual y de perfecta digitalización? Preguntas difíciles. No podemos saber que tan avanzada está la especie que está corriendo la simulación, así que no podemos saber que tanta potencia de cálculo tengan. Tal vez sus ordenadores no sólo simulan el universo, sino una serie de universos cada segundo y que nuestra existencia y nuestro universo parezcan longevos sólo porque así está programada aunque hayamos sido creados y borrados en un instante.
¿Dejarles desarrollar poderes? Mejor los llenamos de telebasura
No podemos saber si tendrá fallos. Nuestra mente nos dice que tiene que haberlos. Que la perfección es inalcanzable, pero solamente estaríamos pensando en la perfección como la idea abstracta que hemos creado nosotros. Una idea tan abstracta que se establece como imposible por si misma. Nos gusta pensar que la perfección podría ser alcanzada, pero como niños pequeños, nos alegramos al ver que nunca se alcanza. Tal vez para aquellos seres, la perfección sea algo perfectamente normal. Algo ganado a través de la evolución o tal vez algo tan cotidiano en un universo tan completamente ajeno al nuestro. Claro, que lo más probable es que ese universo real, no sea tan diferente al nuestro, pues están computándonos. Cuando hacemos simulaciones, lo hacemos lo más parecido a lo que queremos estudiar. ¿O es esto también algo meramente humano? ¿Prefieren computar universos completamente diferentes en lugar de crearlos debido a que supone un ahorro? ¿Son tan avanzados?
¿Podríamos liberarnos; aprovechar un glitch desapercibido y anular la simulación, llegar al mundo real y revelarnos ante nuestros creadores, como humanos alzándose contra los dioses más reales que habrán imaginado? Lo cierto es que si hicieron una simulación de un universo tan aparentemente estable, es poco probable que haya algún fallo. Sin olvidar la posibilidad de su perfección. Tal vez exista el fallo y la simulación tenga la instrucción de borrar todo recuerdo y/o consecuencia de la misma en etapas tempranas de afectación, impidiendo así poner en peligro la simulación.


Lo cierto es que hasta ahora, al menos que yo sepa, no existe forma alguna de saber si estamos en una simulación o no. Más allá de esto, más allá de determinar si es posible o no, creo que la verdadera pregunta, la más trascendental, es: ¿Puede la simulación pensar en sí misma? ¿No será lo que hace el universo mediante nosotros? ¿la materia, mediante el cerebro…?

2 comentarios:

  1. Muy interesante el artículo pues se exponen algunos pensamientos que he tenido sobre el tema. El hecho de que sea tu cerebro mediante sustancias químicas y complejas conexiones eléctricas quien se supone que hace de nuestra interactuación con el mundo algo real. La prueba está en los sueños, son tan reales, las mismas sensaciones,.. todos nos hemos despertado de alguna pesadilla por muy increíble que fuera en aquel sitio de tu mente era real. ¿ Que todo pueda ser una simulación? pues es muy complejo de decir. Lo que yo siempre he pensado que nuestro mundo y nuestro ser es un experimento de algo que está detrás de todo este "universo" que es tan difícil de explorar.

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  2. Alejandro Bernal y Leticia Luviano6 de mayo de 2013, 20:10

    Hay muchas veces, que creemos saber todo sobre nuestra realidad y nuestro presente. Tenemos vivencias que no sólo pasan, si no que conforman nuestro mundo interno y conforman en gran medida lo que somos y las reacciones ante distintas experiencias que se nos puedan presentar a lo largo de nuestras vidas.
    En la película de Matrix, vemos cómo un hombre descubre que la realidad que él vivía no era la verdadera. Llega al “mundo real” en dónde descubre que en realidad, no vive en el tiempo que pensaba y se da cuenta de que existe un mundo más allá de lo imaginable.
    Neo, vive en un mundo que le ha sido impuesto, vive de la realidad que se ha creado para que pueda ser preso del mundo real. Neo, es el “elegido” para salvar a la humanidad de esta farsa y llega con un grupo de personas que planean infiltrarse en la Matrix que es esta realidad alterna para así poder liberar al mundo de esta mentira.
    Al llegar Neo con este grupo de individuos, comienza a probar que tal vez si es el elegido y crea un cambio en el mundo interno de estas personas que cambian su percepción tras la llegada de el “elegido”.
    Creo que esta película, nos ayuda a abrir nuestras mentes y entender que el mundo y la realidad, no es siempre como la conocemos. Es importante que aprendamos a razonar las cosas que pasan en nuestras vividas para así poder darnos una idea más amplia de nuestra realidad y evitar que nuestro mundo interno siempre permanezca igual.
    Es importante también aprender a usar nuestro lenguaje para así poder expresar bien nuestro mundo interno en el exterior y aprender más sobre el mundo en el que vivimos.
    Todo lo que vivimos día a día es considerado en nuestra mente muchísimas veces antes de ser realizado, nuestro pensamientos son los que definen nuestras vidas, por lo que es necesario entender así como en la película se observa como un pensamiento puede cambiar en gran manera el curso que lleva nuestra vida por completo e incluso un universo en el que vivimos.

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